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¿Qué es saber hablar?

Saber hablar para muchos es mostrar que tan cultos podemos llegar a ser, es una señal de prestigio sociocultural y de buena educación. Además sabemos que la persona que habla bien, obtiene reconocimiento social.

De igual forma, saber hablar no es sólo llegar a articular sonidos de modo más o menos coherente, ya que todos los seres humanos sabemos hablar, al menos que exista algún problema físico, pero no cualquiera sabe hablar bien, para eso es necesario un entrenamiento y ensayos continuos.


Ahora bien, se dice que el que sabe hablar busca la forma de persuadir a los oyentes, ya que todo discurso hablado o escrito tiene una intención. Saber hablar bien es llegar a obtener habilidades argumentativas y ponerlas en práctica.


Indiscutiblemente, hablar es una actividad natural, además de una actividad esencial y común, pero hacerlo bien requiere de la educación del habla, y así llegar a ser un buen hablante u orador.


Para hablar bien hay que seguir un patrón de normas y tener presente que la norma léxica está sometida a cambios más rápidos que la de tipo gramatical. Estas reglas son establecidas hoy en día por la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española.


Así mismo, existe un diccionario panhispánico de dudas, ya que las instituciones académicas citadas han aceptado la palabra extrovertido, junto a la etimología extravertido, aunque se sigue recomendando está última forma, por ser la preferencia en la lengua culta, a su vez permiten escribir guion y guión.


Por otro lado, es necesario cuidar lo que se escribe, ya que un error cometido por el canal gráfico escrito queda, pero lo fónico nos permite corregir lo anterior.


También, hay que tener en cuenta que al hablar debemos saber para quién hablamos, no siempre el que habla correctamente sabe hablar en contexto, no hay que exagerar con las palabras, ya que resultaremos pedantes.


De igual forma, debemos tener en cuenta a qué personas nos dirigimos, ya que no es lo mismo que un profesor le hable a sus estudiantes de preescolar como le habla a sus estudiantes de la universidad, este debe usar palabras que se ajusten al entorno o contexto en el que se encuentra.


No obstante, también debemos pensar antes de hablar, específicamente en un discurso oral, hay que organizar las ideas, y así lograr una aceptación positiva entre los interlocutores.


Para esto es necesario conocer el tema que se irá a exponer, empezar con una breve introducción, plantear preguntas que poco a poco se irán resolviendo, y finalizar con unas conclusiones e interrogantes de los oyentes de acuerdo al tema expuesto.


A su vez, es necesario mirar a todos los presentes y no dirigir la mirada a uno solo, ya que provocará el desagrado del público; tampoco es recomendable excederse del tiempo estipulado, porque los oyentes se cansarán y no escucharán lo que se habla, también es aconsejable hacer un buen uso de los gestos y los movimientos del cuerpo.


Finalmente, nadie habla por hablar, siempre hay una meta que lograr, aunque sólo sea la de mantener las relaciones sociales o la de buscar una mayor integración con el otro grupo social. El saber hablar bien es un saber estratégico para el punto de vista lingüístico y social, por lo tanto hay que aprender a hablar bien.
Briz, A. (Coord.) (2008) Saber hablar. Madrid: Santillana Ediciones (p. 19 - 46)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

no es nada hablante y oyente

Anónimo dijo...

es sierto